jueves, 18 de noviembre de 2010

Ecce Hommo

Un pesebre de belén era de Jesús la cuna,
tibia y ligera pajita su breve cuerpo cubría
Se introdujo en el establo un reflejo de la luna
y bajo el fulgor celeste, vela la Virgen María.

Atemorizan a Herodes las antiguas profesias
anunciando el nacimiento del Rabino prometido,
influyéndolo pronósticos de la maligna Herodía
decreta sea degollado el hebreo recíen nacido....

Llenos de intenso pavor deciden José y María
llevando en brazos al Niño fugarse de Palestina.
Después de ásperas jornadas Egipto los acogía,
quedando el pequeño a salvo de la cuchilla asesina...

En exilio crece el hijo retraido y sensitivo,
su padre en CI reverencia al Mesias de Israel.
Es sumiso y en los ojos algo grave y sugestivo
daba a la madre el impulso de arrodillarse a sus pies...

Regresan a Nazareth y comienza la tarea
del Rabino taciturno de expresiva mansedumbre.
Predica el Evangelio en la inquietante Judea
y, ávida de sus promesas, le sigue la muchedumbre...

El Maestro presintiendo el final de su destino,
en legado a sus discípulos deja encomienda divina,
las huellas de sus sandalias señalaban el camino
por donde irían los apóstoles divulgando su doctrina...

Descubren los fariseos sitios de su devoción.
Allí, solo e Indefenso aprisionan a Jesús.
Ellos poseen la daga para herir su corazón
cuando conducido al Golgóta esté clavado a una cruz.

Iniciado el drama inicuo concluye la última escena
perpetrando el sacrilegio de aquella sentencia Iimpía.
Los sicarios se disputan su túnica nazarena,
como en Belén, a su hijo vela la Virgen María...

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